La Calera cae goleada en el Maracaná
Con Mauricio Isla, que jugó todo el partido, Flamengo apabulló por 4-1 a los cementeros, en Río de Janeiro, por la segunda fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores. Pese a la goleada, el elenco chileno no hizo un mal partido, pero pagó caro los errores y no pudo ante la gran calidad ofensiva de los cariocas.
Los cementeros aguantaban bien en el Maracaná. Incluso, por momentos, controlaban con relativa tranquilidad la pelota, aunque con nula profunidad. La primera media hora del partido asomaba favorable para el cuadro chileno, porque el local, con Mauricio Isla de lateral derecho, no presionaba con demasiada intensidad.
Sin embargo, tal como le ocurrió a Universidad Católica ante Atlético Nacional, en Medellín, en solo cinco minutos todo se fue a la basura. Una rápida combinación entre Gerson y Giorgian de Arrascaeta terminó con un centro impecable para Gabriel Barbosa, que anticipó a los centrales para conectar el balón con la pierna derecha y así batir a Alexis Martín (31′).
La apertura de la cuenta le dolió al equipo de Luca Marcogiuseppe, que intentó reaccionar rápido adelantando las líneas. La osadía le salió cara, porque en un feroz contragolpe, el uruguayo De Arrascaeta puso el 2-0 parcial, tras una buena combinación con Bruno Henrique (35′).
El castigo pudo ser peor, porque los cariocan tuvieron dos opciones más para aumentar. De hecho, Gerson había marcado el 3-0, pero el árbitro venezolano José Argote anuló la conquista por un planchazo contra el defensa Santiago García.
En ese sentido, lo mejor que le pudo pasar a los caleranos fue el término del primer tiempo, porque en el complemento se vio a un cuadro cementero mucho más compacto y peligroso, al menos, en un comienzo. Para eso fueron claves los ingresos de Sebastián Sáez y Jorge Valdivia.
Fue el Sacha el que alimentó la esperanza de los nacionales con una gran definición, mano a mano, contra el experimentado portero Diego Alves. El exdelantero, bicampeón con la UC, aprovechó un exquisito pase de Simón Ramírez y se fue solo hacia el pórtico rival, logrando el valioso descuento (57′).
Flamengo, que salió algo relajado en el segundo tiempo, entendió la advertencia y apretó el acelerador. Fueron momentos entretenidos, con el partido de ida y vuelta, pero con el cuadro local siempre más preciso y cometiendo menos errores.
Un mal pase de Gonzalo Castellani, cerca de la medialuna propia, fue capturado por Bruno Henrique, quien pacientemente esperó que Gabigol se abriera por la derecha del área para habilitarlo. El delantero definió con un potente derechazo cruzado bajo. Ahí el partido se acabó.
Luego, tras un córner de La Calera, otra vez un contragolpe liderado por Bruno Henrique terminó dentro del arco de Alexis Martín. Fue un golazo, obra de Pedro, quien controló en el área, evadió a dos defenas rivales y luego se la picó al meta argentino de los cementeros. Una conquista de gran factura para sentenciar el partido.
Un 4-1 que fue demasiado castigo para el elenco chileno, pero que se justifica por la jerarquía y la gran calidad del Flamengo de Mauricio Isla, un equipo que no perdona ninguna equivocación y que por algo es uno de los candidatos a ganar la Copa Libertadores, como ya lo hizo en 2019.
Ficha del partido
FLAMENGO 4-1 UNIÓN LA CALERA
Flamengo: Diego Alves; Mauricio Isla, Willian Arao (89′, Leo Pereira), Bruno Viana, Filipe Luis; Diego (89′, Joao Gomes), Gerson; Everton Ribeiro (81′, Vitinho), Giorgian de Arrascaeta (89′, Michael); Bruno Henrique (83′, Pedro), Gabriel Barbosa. DT: Rogerio Ceni.
Unión La Calera: Alexis Martín; Simón Ramírez (80′, Matías Fernández), Christian Vilches, Santiago García, Yerco Oyanedel; Esteban Valencia (71′, Ariel Martínez), Gonzalo Castellani (80′, Brian Liuzzi), Erick Wiemberg; Jeisson Vargas (46′, Jorge Valdivia); Andrés Vilches, Matías Cavalleri (46′, Sebastián Sáez). DT: Luca Marcogiuseppe.
Goles: 1-0, 31′, Barbosa (F); 2-0, 35′, De Arrascaeta (F); 2-1, 57′, Sáez (ULC); 3-1, 79′, Barbosa (F); 4-1, 85′, Pedro (F).
Árbitro: José Argote (VEN). Amonestó a Vitinho (F); Valencia (ULC).
Estadio: Maracaná, Río de Janeiro. Sin público.
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