Venezolana Yulimar Rojas bate su récord mundial de triple con 15,74
Un oro más, un récord más, Yulimar Rojas está empeñada en reescribir la historia de una disciplina que ya la tiene en lo más alto. Ninguna atleta femenina en la historia ha dado un salto más largo que el conseguido por ella.
La venezolana Yulimar Rojas se proclamó en Belgrado por tercera vez campeona mundial de triple salto en pista cubierta, una gesta sin precedentes, y destrozó su récord mundial absoluto con una marca de 15,74 metros en su último salto.
Su récord mundial absoluto lo tenía con los 15,67 metros que le dieron el título olímpico en Tokio 2020, y tiene el de pista cubierta con 15,43 desde hace dos años, conseguido en Madrid. La caraqueña de 26 años celebra la corona conseguida en Belgrado pero a la vez manifiesta que va por más y que aún tiene objetivos por alcanzar, así lo dio a conocer a la prensa presente en Belgrado.
«Ha sido una mañana de ensueño. Quería divertirme y demostrar todo el trabajo que hemos hecho. Tenía algunos problemas en los primeros saltos con los impulsos, pero Iván (Pedroso) y yo somos uno y juntos los hemos ido hablando y solucionando para acabar haciendo el salto que ha supuesto el récord del mundo. Él es la persona que ha logrado hacer de mí lo que soy ahora mismo», comenzaba.
La campeona Mundial y olímpica solo conoce el oro en las grandes citas desde el 2017 y considera que es todo gracias al trabajo y el amor que le pone a lo que hace. «Nada es imposible, es el eslogan en el que cree Yulimar Rojas. Trabajando cada día con amor por lo que deseas se cumplen los objetivos y yo tengo dos principales: superar a la leyenda, a mi maestro, en títulos mundiales, algo que Iván sabe que llegará (ríe) y la otra es llegar a 16 metros. Pienso que he nacido para llegar a ese número y que eso sirva de motivación e inspiración a otros para que el atletismo siga siendo importante, y cada vez más, en el mundo. Sé que alcanzaré esa meta en mi vida».
La espigada atleta de 1.92m también habló de su ritual antes de iniciar una carrera para saltar: «Antes de saltar, me digo muchas cosas, me vuelvo loca a mí misma. Me digo: ‘Vamos, negra. Es ahora. Sí, se puede’. Trato de motivarme y dar órdenes a mi cerebro, a mis músculos, a mis piernas… Intento por así decirlo hacer el salto mentalmente antes de caer en la arena. La visualización es fundamental».