Saul “Canelo” Álvarez sigue como rey de los supermedianos
El boxeador mexicano se presentó en el T-Mobile Arena de Las Vegas y terminó con el invicto del puertorriqueño Edgar Berlanga en las tarjetas
Sigue siendo el rey. Saúl «Canelo» Álvarez (62-2-2, 39 KO’s) volvió a demostrar su dominio en las 168 libras al arrebatarle el invicto a un valiente Édgar Berlanga (22-1-0, 17 KO’s) , quien, a pesar de haber caído a la lona en el tercer asalto, terminó la pelea buscando la victoria.
Canelo venció por decisión unánime de los jueces a Berlanga y mantuvo los títulos de peso supermediano de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada. Reviví la pelea.
El mexicano tuvo un arranque cauteloso, pero firme para demostrar su poderío en la categoría de peso supermediano y aunque también el puertorriqueño comenzó a dejar ver sus jabs desde el arranque, Canelo lo desestabilizó en el tercer round para mandarlo a la lona de manera temprana. Sin embargo, rápidamente logró incorporarse y seguir en pelea.
Ante los intentos de mantener distancia de Berlanga, el experimentado boxeador de 34 años se mantuvo firme durante la primera mitad del combate, viéndose beneficiado con el achique de los espacios y acorralando a su contrincante a las cuerdas.
Para el quinto asalto, la pelea se tornó sucia, lo que llevó al réferi a intervenir en varias ocasiones. Ambos boxeadores se enfrascaron en un intercambio verbal que elevó la tensión en el ring. En el sexto, Berlanga mostró su resistencia y habilidad, defendiendo bien su posición a pesar de estar acorralado en las cuerdas. Incluso puso a prueba la quijada de Álvarez con un sólido gancho de derecha, pero Canelo permaneció imperturbable.
En el séptimo asalto, el nacido en Puerto Rico cayó nuevamente, pero esta vez se trató de un resbalón. El juez frenó la pelea para que se reincorpore sin problemas. A partir de allí, con enojo por considerar que el de México lanzó golpes ilegales para adherirle picante al evento, el puertorriqueño comenzó a arriesgar más ya sabiendo que las tarjetas se estaban inclinando a su oponente.
Sin embargo, ya dejando ver su cansancio, no pudo destacarse y fue Canelo quien logró mantenerse hasta el final firmemente para que las tarjetas fueran a su favor con un contundente 117-110, 118-109 y 118-109.