Fue campeón de Chile y representó al país en los juegos olímpicos de México. Nacido en Maullín cerca de Puerto Montt, donde vivió su vida deportiva, muriendo esta madrugada.

Honorio Bórquez nació en 1947 en Maullin y esta madrugada de domingo a las 04.15 horas nos dejó tras una larga vida dedicada al deporte fundamentalmente al boxeo que por ello está de luto

Su primera Corona fue el Campeonato de os barrios de Puerto Montt en 1966 en Mediano Ligero y fue Campeón de Chile en los Nacionales de 1967, 1968, y 1969.

Representó a Chile en los Juegos Olímpicos de México en 1968 , perdiendo por puntos en primera ronda ante el alemán Gunther Meyer ( la derrota más dolorosa de su carrera , según relató después , ya que quería ganar para sus admiradores que habían viajado desde el Sur de Chile para verlo).

Fue Campeón de los Mediano Ligero en el Campeonato Latinoamericano de ese mismo año , que se disputó en el Caupolicán de Santiago. Sus mejores y más inolvidables victorias fueron ante 2 futuros Campeones del Mundo.

Ganó al brasileño Miguel de Oliveira en 1968, por unanimidad en las tarjetas. Incluso De Oliveira cayó a la lona en el segundo asalto. El brasileño fue Campeón del mundo de los Medianos Ligeros versión CMB en 1975.

Y también venció al gran Víctor Galíndez de Argentina por puntos en Marzo de 1968. Galíndez fue Campeón mundial de los Livianos, versión AMB en 1974.

Famosisimas fue su trilogía de combates con Roberto Ulloa, por la Corona de los Medianos de Chile.  En la primera, en Julio de 1972 , en el Estadio Chile, ganó Ulloa por KO al octavo asalto .

En la revancha, en Septiembre de 1972, en Puerto Montt, la pelea fue declarada nula. El árbitro sufrió la agresión del enfervorizado público que no estaba de acuerdo con sus decisiones. También Ulloa sufrió las consecuencias, ya que fue agredido igualmente y al participar de los incidentes, fue despojado del Cinturón. Finalmente, no hubo fallo.

Todo se decidió en el tercer combate celebrado en Marzo de 1973. Ganó Ulloa por KO al séptimo asalto. El juez Carlos Diaz, detuvo el combate, dado el castigo recibido.

Pero dos peleas grafican muy bien toda la potencia que tenía El Coloso: En 1969, en Guayaquil, lo venció el uruguayo José Filloti. Pero fue tal el castigo que recibió por parte del Coloso que el oriental decidió retirarse de ese Campeonato Latinoamericano.

Y en 1975 derrotó por KO a Juan Domingo Álvarez, quien falleció al tiempo después , consecuencia de los castigos recibidos. El Coloso, un boxeador duro, fuerte, y que tenía la característica de sonreír mientras recibía y daba y que hoy a los 77 años nos ha dejado pero su leyenda continua vigente.

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