Gracias a un golpe de suerte, el mexicano Jaime Munguia fue noqueado por el francés tras un tremendo derechazo. El galo sólo había peleado contra compatriotas y nunca había salido de su país

En el mes de mayo, Jaime Munguía (44-2, 35 KOs) acudía invicto -y tras noquear a John Ryder- al combate más importante de su carrera, contra Saúl ‘Canelo’ Álvarez. La pelea fue dominada por el veterano campeón y hay quien piensa que incluso podría haber noqueado a su oponente.

En cualquier caso, Munguía salía con la experiencia de haber estado sobre el ring junto al número uno durante 12 asaltos. Poco después de aquello, el joven tijuanense rompió su efímera relación con el entrenador Freedie Roach, conocido sobre todo por llevar a Manny Pacquiao a la gloria.

Con poco descanso, en septiembre Munguía se enfrentó a Erik Bazinyan, un buen rival, al que pudo noquear en el décimo asalto. Con menos descanso aún, encaraba anoche su cuarta pelea del curso, a la que llegaba ya como cabeza de cartel y en su tierra, Tijuana.

Su rival, el francés Bruno Surace, quien se presentaba con 25 victorias en su carrera -sólo cuatro por KO- y dos empates. El galo, de 26 años, ha mejorado levemente sus promedios (26-0-2, 5 KOs) tras lo que muchos califican como la sorpresa del año.

Se podría decir que hasta el desenlace Surace había perdido todos los rounds; incluso fue derribado en el segundo asalto. Sin embargo, siguió muy entero y en el cuarto mandó un aviso a su rival en forma de uppercut seguido de un par de derechazos. Había peligro en sus puños para un desprevenido Munguía.

El francés, consciente de que podía volver a tener otra buena oportunidad, siguió trabajando y en el sexto asalto lanzaba un derechazo limpio que eliminó y arruinó la fiesta del mexicano. Hubo conteo, pero después de tal golpe, no lo superó. Julio César Chávez, en primera fila comentando, se quedó con la boca abierta.

Lo que hace más llamativo el triunfo, es que Surace durante su carrera sólo se había enfrentado hasta ayer a púgiles franceses, no había salido de su país y su máximo logro había sido el EBU Silver, que es el segundo título europeo. Actualmente, el europeo no está clasificado por ninguno de los cuatro organismos sancionadores, algo que cambiará rápidamente después del mejor resultado de su carrera.

La victoria de Munguía se daba tan segura que se hablaba de enfrentarlo al boxeador francés que realmente está de moda, Christian Mbilli, o una revancha con Canelo. Pero por desgracia para él, ha retrocedido varias casillas, al contrario que Surace, que se ha ganado una oportunidad mayor.