Abierto de Australia WTA: Madison Keys sorpresiva campeona

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Una victoria para el recuerdo de la estadounidense que alcanza la gloria venciendo a la bielorrusa y uno del mundo, Aryna Sabalenka en 3 set

Madison Keys encontró el camino para derrocar a la última campeona del Abierto de Australia. La estadounidense mostró un alto nivel de tenis para oponerse a la, venciéndola en tres sets y consiguiendo su primer título de Grand Slam por 6/3, 2/6 y 7/5 en 2 horas 03 de partido.

Después de dos extenuantes semanas, Aryna Sabalenka (1°) y Madison Keys (14°) se paraban frente a frente en el estadio Rod Laver Arena para sentenciar a la reina de Melbourne 2025.

La tenista bielorrusa llegaba a la última batalla con la intención de revalidar el título de la edición anterior y con la posibilidad de conseguir su tercera corona al hilo. Sabalenka venía de tachar a Paula Badosa en semifinales, ratificando su dominio en el circuito, mientras que la estadounidense derrotó a la segunda sembrada, Iga Swiatek, aumentando su racha de victorias.

Ambas tuvieron un fantástico inicio de temporada, la jugadora americana se alzó con el título en Adelaida, en tanto que la bielorrusa se consagró en Brisbane. La última vez que se enfrentaron fue en los octavos de final de Pekín, donde Sabalenka consiguió la victoria en dos sets. La serie se encontraba a favor de Aryna con cuatro triunfos sobre uno de Madison.

En los primeros compases del partido, los condimentos de Madison Keys se desparramaron por la pista. La estadounidense sacó a relucir sus veloces golpes para desarticular a Sabalenka y concretar un quiebre temprano para después ratificarlo en su turno de servicio con la misma intensidad.

La bielorrusa no lograba decodificar el juego de su oponente, los tiros le llegaban a una velocidad poco común en su ambiente y no podía hallar buenas sensaciones, eso la llevó a perder el saque nuevamente. Por su parte, Keys estaba intratable, atacaba con total convicción, sobrepasando a su adversaria en cada perímetro del terreno.

De todos modos, la norteamericana iba a tener un traspié en el encuentro, cediendo su saque en el octavo game tras algunos errores no forzados. Lo que parecía ser una oportunidad para la bielorrusa, terminó siendo un juego desolado, ya que Keys volvió a hacer los honores desde el resto, afinando sus ejecuciones para llevarse el primer set por 6-3.

Al comienzo del segundo asalto se pudo apreciar a una Sabalenka más confiada en sus decisiones, generando tiros efectivos, pero sin poder contrarrestar los ataques inminentes de la estadounidense. La diferencia entre las protagonistas se fue achicando en el transcurso de la contienda, la bielorrusa logró fabricar ocasiones de break con golpes más profundos y consiguió la ruptura en el tercer juego.

Keys insistió desde su posición, haciendo trabajar a su rival, aunque no tuvo la posibilidad de recuperar el quiebre. Luego, Aryna volvió a imponer sus armas, variando un poco más los tiros, y desenfundó un passing cruzado para marcar otro break.

La número uno del ranking debió refrescar sus ideas, empezó a jugar pelotas cortas, sin dejar de acelerar desde el fondo, lo que le permitió conseguir puntos en los intercambios largos. Keys perdió consistencia en su tenis, no podía encadenar puntos ganadores como en un principio y eso le dio pie a Sabalenka para poder ejecutar su juego, quedándose con el segundo parcial por 6-2.

En el inicio de la tercera manga las jugadoras se mostraron firmes en sus turnos de servicio, plasmando lo mejor de sus cualidades para establecer los primeros dígitos. No existía margen de error para las protagonistas, arriesgarse en ataque podía no ser la mejor opción, pero de igual manera tenían que crear oportunidades.

Tanto Sabalenka como Keys, dos tenistas de mucha potenica, mostraron solidez a la hora de sostener el saque, ninguna estaba dispuesta a ceder y se exigían en cada punto. La paridad perduró hasta el duodécimo game, momento exacto en el que Madison Keys resplandeció en el terreno, destacando su gran derecha para firmar el quiebre que la acreditó como la campeona del Abierto de Australia.